No se trata de ir por la vida con una botella de lejía en una mano y con papel aislante en la otra, pero inclusive en los lugares más insospechados se pueden alojar cientos de gérmenes que atentan contra tu salud. ¿Sabes cuáles son? Dale un vistazo a esta lista y entérate.
1. Menús. Las cartas de los restaurantes son una de las superficies más asquerosas con las que uno se topa a diario: cientos de personas los tocan semanalmente dejando sus gérmenes, y rara vez –o nunca- se lavan. Ten en cuenta que, según un estudio publicado en el Journal of Medical Virology, los virus del resfrío y la gripe pueden sobrevivir hasta 18 horas sobre superficies como esta. Ya lo sabes: nunca dejes que la carta toque tu plato o cubiertos y recuerda lavarte las manos tras hacer tu pedido. Bon Appetit.
2. Gajos de limón. De acuerdo a un estudio publicado en el 2007 por el Journal of Enviromental Health, cerca del 70% de los gajos de limón que se ponen en los restaurantes como decoración o para acompañar un plato contienen microbios causantes de enfermedades. Para que te des una idea: cuando los investigadores ordenaron bebidas en 21 restaurantes diferentes, encontraron 25 tipos de microorganismos, incluyendo la E. Coli y bacterias fecales. Qué asco.
1. Menús. Las cartas de los restaurantes son una de las superficies más asquerosas con las que uno se topa a diario: cientos de personas los tocan semanalmente dejando sus gérmenes, y rara vez –o nunca- se lavan. Ten en cuenta que, según un estudio publicado en el Journal of Medical Virology, los virus del resfrío y la gripe pueden sobrevivir hasta 18 horas sobre superficies como esta. Ya lo sabes: nunca dejes que la carta toque tu plato o cubiertos y recuerda lavarte las manos tras hacer tu pedido. Bon Appetit.
2. Gajos de limón. De acuerdo a un estudio publicado en el 2007 por el Journal of Enviromental Health, cerca del 70% de los gajos de limón que se ponen en los restaurantes como decoración o para acompañar un plato contienen microbios causantes de enfermedades. Para que te des una idea: cuando los investigadores ordenaron bebidas en 21 restaurantes diferentes, encontraron 25 tipos de microorganismos, incluyendo la E. Coli y bacterias fecales. Qué asco.
3. Perillas de baño. Un lugar bastante obvio, pero que poca gente toma en serio. Sobre todo si estás en un baño público, trata de abrir la puerta con un pedazo de papel higiénico y saldrás libre de enfermedades. Sí, es probable que te veas un poco freak, pero recuerda que aunque tú te hayas lavado las manos, la mayoría no.
4. Dispensadores de jabón. Puede sonar irónico, pero lo cierto es que cerca del 25% de los dispensadores en baños públicos están contaminados con bacteria fecal. “La mayoría nunca han sido lavados, así que las bacterias se alojan mientras el jabón se acumula”, revela la revista especializada en salud ‘Prevention’. Para evitar contagios, lávate las manos con agua caliente por unos 20 segundos y si tienes desinfectante en gel, úsalo.
5. Carritos de compra. ¿Sabías que los carritos de supermercado están más cochinos que un baño público promedio? De acuerdo a un estudio de la Universidad de Arizona, casi dos tercios de estos están contaminados con bacterias fecales. Así que si tienes una toallita desinfectante, úsala: tu salud lo agradecerá.
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